Por: Antonio Revello

Sentados en el boliche del “Osito” Muñoz, especie de unidad básica o comité del partido vecinal “Long Play”, estaban nuestros conocidos personajes debatiendo sobre el programa a implementar con el tema de los contactos personales con los vecinos de diferentes barrios. La cosa venía bastante áspera con lo sucedido el domingo anterior y la frustrada “timbreada” para ganar adeptos a la causa partidaria. En un rincón del local y con una bolsa de hielo en las bolas, estaba el “Cachorro” más blanco que ratón de panadería. Cada rato, cambiaba de posición en la silla en la que estaba sentado y en la cara se le dibujaban gestos de verdadero dolor.

El “Gordo Petete” explicaba a los parroquianos: “A diferencia de lo que ocurre tanto con los ovarios como particularmente con el dolor de ovarios -ya que tienden a no ser órganos con sensibilidad, de manera que en realidad no causan dolor-, los testículos sí que son muy sensibles, lo que se traduce en que cualquier lesión o golpe –por menor o ínfimo que éste sea- pueden causar mucho dolor. Como sabrán, los testículos son las gónadas masculinas, los cuales son de muchísima importancia en el desarrollo sexual, y presentan dos funciones principales: son coproductoras de los espermatozoides y de las hormonas sexuales (fundamentalmente la testosterona, encargada de regular el desarrollo sexual en el hombre, el nivel de deseo y la propia función sexual).

“El Cachorro, joven y bien alimentado, tiene un exceso notable en la producción de testosterona que lo lleva  a ‘desbordar’ de espermatozoides y de hormonas masculinas. En otras palabras… siempre anda ‘alzao’. Caliente como ‘pava e’ lata’ o ‘negra en baile’. Según los médicos, los testículos los encontramos dentro del escroto y consisten en un par de bolas cuyas dimensiones suelen rondar los 5 centímetros de largo por los 3 centímetros de ancho. Aunque presentan un tamaño bastante similar, es común que un testículo cuelgue un poco más que el otro. Dado que los testículos son una de las zonas más delicadas del cuerpo del hombre, son extremadamente sensibles tanto al tacto como a la presión. Por ello el escroto cuenta con una importantísima función: protegerlos no solo de los cambios de temperatura, sino de los impactos físicos”.                                                                                    

“En palabras campechanas, los huevos del ‘Cachorro’ son más grande que lo normal -de simple huevón que es- y el patadón del negro Casimiro lo conmovió hasta las pestañas”.

Acurrucadito en el rincón y casi sin hablar, aguardaba que le hicieran un escáner nuclear o una gammagrafía para medir la gravedad del daño ocasionado. Estaba esperando al “Pitoto” que lo llevaría en su chatita al sanatorio. No tenía ganas ni de hablar… Sólo asentía con la cabeza al discurso del “Gordo Petete”. A su lado se encontraba su tío Don Inocencio, con un vendaje en la cabeza al estilo de los jugadores de fútbol y encima una boina blanca que se le enroscaba hasta las orejas.  

-¿Cómo anda sobrino? ¿Un poco mejor?

-Estoy asustao Tío… Mire si me tienen que cortar los huevos… Voy a quedar toruno…  

-No es para tanto sobrino… Ha sido una patada  traicionera.

-Seguro que si le cortan los huevos… se va a ir para arriba como eructo de buzo… 

-Por favor  Pumita… no estamos para la joda, ni mi sobrino ni yo.

-Cordobés culiao y fayuto…

-Dejalo ahí… sobrino… El Pumita es más desubicado  que Güemes en la Guerra de las Galaxias…

-Mal llevao  el hombre… Está llegando el Pitoto, expresó el Matrero mirando por la ventana.

-Hola gente…. me tomo un ferné con coca y enseguida salimos para la clínica Cachorro.

-Bueno Pitoto, comentó el Cachorro.

-¿El domingo que viene seguimos con la timbreada?

-Lo estuve pensando…  La idea del Gaucho de Catanzaro me gusta. Podemos hacer el asado en algún barrio marginal del distrito, siempre y cuando donés una vaquillona.

-No hay problemas Matrero… No le tocás el timbre a ningún sordo. Yo pongo la vaca…

-Y la lista de candidatos a ediles… ¿Cuáles serán los primeros lugares?

-Pare la mano Don Aarón…

-Ojo… Aarón con dos “a”.

-Demasiado interesado el moishé…

-Vea Don Aarón… El primer lugar de la lista es para el Gaucho Matrero y el segundo para el “Pitoto”, después discutimos el resto.

-Vea Pumita… no estoy de acuerdo… Con viento a favor y mucho trabajo podemos conseguir un solo escaño en el Concejo…

-Y bueno… esa es la idea, el objetivo. Si lo logramos… Después negociamos otros puestos…

-A mí… me gustaría estar con mi sobrino, el “Teddy”, en Legal y Técnica.

-Tenga mano tallador… que esto recién comienza.

-Pero… Matrero… yo quiero un puesto oficial.                                                                   

-Afloje con ese tema Don Aarón… con doble “a”.

-Se me inundó el campo y no tengo ingresos para subsistir… Solo me salvo con un puesto en la Municipalidad…

-Vea Don Aarón… Nosotros no somos “más de lo mesmo”. Si se le inundó el campo… ponga un pesquero y alquile botes… Canejo.

-No se enoje Don Matrero, además Don Aarón ya está jubilado… Tiene como setenta años… ¿Quién lo va a tomar?

-Ta´claro el concepto Catanzaro… Sigamos armando la movida pal domingo.

-Yo opino…. yo opino que debemos ir al barrio Municipal, donde sesionó el Concejo esta semana pasada. Pegamos en caliente en un barrio bastante problemático con muchas deficiencias.

-Toy de acuerdo “Pumita”… Mucha de esa gente, ciudadanos de Junín, tienen más hambre que ratón de ferretería. Les vendría muy bien una comilona completa.

-¿Cuál sería el menú?

-Empanadas, vino, choripán, vino, chimichurri, vino, vaquillona con cuero, vino, y de postre arroz con leche.

-Arroz con leche con vino… “Pumita”

-Al que le guste que le ponga lo que quiera.

-Pero “Pumita”… se van a poner  todos empedo…

-La gente se tiene que divertir Don Catanzaro… El vino es un testigo imprescindible de cualquier fiesta. Se festeja con vino desde tiempos inmemoriales…

-Vean compañeros de ruta… “El vino es una bebida de fermentación alcohólica, que se produce por la acción metabólica de levaduras que transforman los  azúcares de la uva en etanol.”

-Pare Petete… pare Petete…  No necesitamos una conferencia suya para armar el evento del domingo…

-“Ya en Egipto, Grecia y Roma, se adoraba a Dionisio o Baco (dios de los viñedos) y la Biblia se refiere al vino en diversos pasajes, entre otros donde relata la última cena de Jesús, que ofreció una copa de vino a sus discípulos transubstanciado en su sangre.

-Ya le dije Petete… pare un momento…

-“Sabemos que en China, hace 4000 años, ya conocían el proceso de fermentación de la uva, y que en Egipto, en el siglo XIV  a.C., ya conocían la viticultura, que debe su mayor desarrollo a la propagación del cristianismo, por ser el vino necesario para la celebración de la misa.

-Nosotros vamos a llevar vino al barrio pa´ festejar el nacimiento de “LONG PLAY”, nuestro partido vecinal. Que la misa… la haga algún cura en la iglesia… Nada que ver con nosotros… canejoooo.

-Tranquilo Matrero… tranquilo… “Osito” sírvale a Petete un birra para que se calle.

-Como Ud. diga Don Catanzaro.

-Gueno… Entonces quedamos con empanadas, chorizos, chimichurri, asado con cuero, arroz con leche y vino.

-Adelante con los faroles Matrero… A terminar de organizar el evento, entonces.

-Manos a la obra carajoooo. Yo me encargo de los chorizos y el pan, gritó el Pumita.

-Ojooo Pumita. Los chorizos que sean de puro cerdo… nada de fulería…

-Tranquilo Matrero… Los chorizos me los hace el nieto del viejo Parola en el barrio del 9 de Julio. Y el “pan felipe” es del mismo barrio, de Pérez con Pan de la calle  Alvarez Rodriguez 385.

-La vaquillona y la leña la traemos del campo del “Pitoto”, dijo el Matrero.

-Yo me anoto con las empanadas, en el barrio me apodan “repulgue feroz”, acotó Catanzaro.

-Hummm… más que repulgue feroz, le dicen “repulga”. Es más sucio que carretilla de matadero, expresó con su vocecita el Cachorro.

-Paren la mano… carajo. Me baño una vez por semana… Y es bastante con este frío… Recuerden que soy de Catanzaro, en la Calabria, entre el mar Jónico y el Tirreno donde la temperatura es cálida y el agua calentita.

-Perdone que me meta Catanzaro… pero a Ud. le gusta poco el laburo… Trabaja menos que el sastre de Tarzán… Y encima quiere hacer 300 empanadas, interrogó Don Inocencio, acomodándose la boina.

-Me están ofendiendo camaradas… Yo me encargo dije… Van a colaborar algunas chicas amigas…

-Bueno don “Cata”… Ud. se hace cargo de las empanadas, mandó el Matrero.

-¿Dónde conseguimos el vino?, preguntó Pitoto.

-Esto corre por mi cuenta. Con 200 litros de vino… ¿estamos bien?

-Claro, claro Matrero… Con veinte damajuanas  zafamos bien…

-También me hago cargo del arroz con leche. Tengo una vecinita especial para el postre…, ja, ja, ja, dijo el Matrero.

-Sólo queda  el chimichurri… ¿quién se hace cargo?   ¿Ud. Don Aarón?

-Lo voy a pensar… Cambio chimichurri por puesto municipal.

-Tá difícil el moishe… Como tejerle un sweater a un pulpo.

-Ya se le va a pasar… Dejenlo tranquilo al amigo, cerró  el Matrero.

-Hablando de Don Aarón -agregó el “Pumita”-. Es tan viejo el judío que en lugar de espermatozoides… tiene “espermatosaurios”