

Por: Redacción Semanario de Junín
NOTA DE TAPA DE LA EDICIÓN IMPRESA Y EDICIÓN DIGITAL Nº 457 DE SEMANARIO DE JUNÍN. SEMANA DEL 12 AL 18 DE ABRIL DE 2025
La impericia de los funcionarios del ejecutivo municipal que conduce Pablo Petrecca, ha llevado a los habitantes del distrito a situaciones realmente muy preocupantes que comienzan a mellar la confianza de los vecinos que hasta ahora venían apoyando la gestión.
Esa falta de profesionalismo ha hecho que no puedan resolverse temas que son de un interés primordial para la economía y desarrollo del distrito que debiera tener un fuerte liderazgo en la región, pero ha quedado relegado detrás de otros que cuentan con la mitad de habitantes.
El próximo 25 de abril se abrirá la licitación de ofertas para la administración de la nueva “Interminalble” de ómnibus. Tuvieron que pasar nueve largos años para que el petrequismo, con su reconocida falencia de personal experimentado, reconociera que no estaba capacitado para esa tarea y encontrara una empresa a la que le brindará una concesión por 30 años con un montón de ventajas y que seguramente serán aprobadas por los concejales adeptos que no hacen más que levantar la mano para el voto afirmativo, sin evaluar condiciones y perjuicios que pudiera haber para los habitantes del distrito.
El manejo personalista de Petrecca y Balestrasse no hace más que demorar una salida para un callejón en el que se metieron solos ya sea por ignorancia o por egoísmo político
De qué manera resolverá el tema del predio de la vieja terminal en plena zona céntrica resulta otro misterio del ocultismo al cual nos tiene acostumbrado esta administración, que ha dado muestra acabadas de falta de transparencia, sin que haya lamentablemente una oposición que controle eficazmente dicha situación.
Pero por lo pronto acontece otro grave problema y es la resolución del paso bajo nivel en la avenida Rivadavia, que a pesar de las urgencias por parte de comerciantes y vecinos allende las vías, los problemas del tránsito y la necesidad de una obra de tal envergadura, los funcionarios que no funcionan siguen objetando soluciones sin ofrecer ninguna y enmarañando a punto tal la situación que se acerca prontamente a un callejón sin salida.
EL OLOR A MEONI
Hay una situación que parece entorpecer todavía más la tarea de Petrecca, como la de su ladero Marcelo Balestrasse, quien renunció a Obras Públicas para ser concejal y que ahora arroja sombra sobre su sucesor, Franco Castellazzi quien -vale decirlo- no viene pegando una.
El dúo tiene un trauma con todo aquello que huela a (Mario) Meoni y así lo vienen demostrando con las obras que dejó el fallecido dirigente. Petrecca lo sufrió como contendiente y Balestrasse habría quedado resentido ya que cuando asumió Meoni como jefe comunal lo desplazó del cargo al arquitecto, que desempeñaba tareas en la gestión de Abel Miguel y esperaba seguir en la órbita estatal y a pesar de Meoni que le consiguió conchabo en la Unnoba, Balestrasse no le perdonó el desaire.
Por eso no hay que ser demasiado puntilloso para darse cuenta de que el petrequismo, con Balestrasse en Obras Públicas, frenó el acuerdo con la empresa Rowing que incluía el paquete de la terminal, la pista de atletismo y el centro cultural al cual terminó convirtiendo en forma inconsulta en un centro de monitoreo, dejando una capacidad ociosa de 80% en el espacio previsto originalmente.
Sumado a eso, cuando Meoni como ministro de Transporte logró habilitar la obra del paso bajo nivel, el oficialismo comenzó a cuestionarla a punto tal de atrasarla, hasta que llegó Javier Milei y la paralizó definitivamente. Ya en 2009, Balestrasse había “petardeado” un proyecto del entonces intendente Meoni sobre el paso bajo nivel con la excusa de que “no era el momento”.
Por eso no resulta novedoso, pero si preocupante, que Petrecca y Balestrasse hoy en día estén entreteniendo al auditorio vecinal con gacetillas en los medios y entrevistas ensobradas, que suelen estar plagadas tanto de adjetivos grandilocuentes como de falacias, aunque sin dudas hoy “es el momento” para resolver si pasamos todos las vías o nos quedamos partidos al medio.
Cuando Meoni como ministro de Transporte logró habilitar la obra del paso bajo nivel, pero el oficialismo local comenzó a cuestionarla a punto tal de atrasarla
SE ACABA LA PACIENCIA
Esta semana que pasó el municipio relató que había llevado un “proyecto alternativo” a las autoridades nacionales a cargo de decidir respecto a la obra del paso bajo nivel de avenida Rivadavia, pero la verdad es que fue una charla basada en un informe realizado por el ingeniero Severiano Tomasino junto al denominado consejo asesor y que no está provisto de ningún plano, ni nada parecido.
Según pudo saber SEMANARIO en base a consultas realizadas a personal cercano a la Agencia de Infraestructura Ferroviaria (ADIF), los funcionarios del gobierno nacional “están perdiendo la paciencia con los de Junín”.
Si bien hubo reuniones a nivel local para ver la manera de reducir los costos y realizar cambios en el tránsito viario para poder resolver la situación que mantiene a la ciudad partida en dos, las alternativas quedaron manifestadas en un borrador explicativo.
Lo que esperan desde ADIF es conocer cuál es el “proyecto” que el municipio dice tener y para eso deben presentarse los planos respectivos elaborados por ingenieros y arquitectos, de cuyo “expertise” no dispone el Ejecutivo municipal.
La elaboración del trabajo debería incluir además los números y planillas representativos de la obra que se quiere llevar adelante, incluida la maniobra que promueve Tomasino para achicar el número de vías y con ello también el largo del túnel.
Según trascendió, “lo que queda claro es que el gobierno nacional no tiene en sus planes soltar un solo centavo para terminar la obra”, que justamente paralizó “definitivamente” en diciembre de 2024.
Por ese motivo, se esperaba también que el municipio produzca documentación referida al modo en que se llevará a cabo la financiación del proyecto, para que la obra sea traspasada de jurisdicción.
Aun así, Balestrasse dijo a la prensa amiga que “se trata de una ‘obrita’ insignificante para el Gobierno Nacional y que no pone en riesgo la política de ajuste del déficit fiscal, pero que para nosotros tiene una envergadura enorme”
Los tiempos son cada vez más cortos, antes que el sistema viario del San Martín sea privatizado y la empresa concesionaria deje de lado cualquier alternativa válida
Lejos de los dichos del hoy concejal, pero virtual encargado de OPM, desde la ADIF les aclararon a los funcionarios de la municipalidad que esperan la presentación formal de lo que se quiere hacer y el cómo hacerlo.
Los tiempos son cada vez más cortos, antes que el sistema viario del San Martín sea privatizado y la empresa concesionaria deje de lado cualquier alternativa válida, dejando sin solución a un problema que generó la clase política y ahora no sabe cómo remontarlo.
Las fuentes indicaron a este medio que desde el municipio “hace un año y medio que vienen a ‘charlar’, pero con nada concreto y siempre cambiantes”.
“Esto no se arregla con charlas, se necesita un proyecto elaborado profesionalmente y con seriedad; sino nosotros no podemos hacer ningún aporte ni dar ninguna solución”, destacaron desde el gobierno nacional.
NO SABE NO CONTESTA
Los vecinos autoconvocados por la obra del paso bajo nivel fueron perdiendo entereza y algunos reconocen que la municipalidad lo único que hace “es dar vueltas sobre lo mismo desde que empezó el conflicto”. De hecho, la misma estrategia fue utilizada en torno a la terminal de ómnibus y hoy llevan ya nueve años sin habilitarla.
El problema es de extrema gravedad, pero Petrecca y Balestrasse ponen la zanahoria por delante de los afectados y, cuando se les complica, rápidamente le echan la culpa al gobierno nacional (el de ahora y el anterior).
Por otra parte, no aceptan ningún otro proyecto que tenga “olor a Meoni”, cuando el mismo consejo asesor que encabeza Tomasino se adecuó al trabajo realizado en 2009, cuando Agustín Pinedo era el encargado de obras públicas del municipio y que al fin y al cabo fue el único profesional que puso reparos cuando ferrocarriles argentinos presentó la obra que realizaría allá por 2021.
SOLUCION O CALLEJON
Así las cosas, y aunque sea por una vez, la dirigencia juninense debe salir de su zona de confort e interesarse por buscar una salida al grave problema que afecta a una buena parte de la comunidad.
El manejo personalista de Petrecca y Balestrasse no hace más que demorar una salida para un callejón en el que se metieron solos ya sea por ignorancia o por egoísmo político.
El “trauma antimeoni” los llevó a desmembrar la secretaría de Obras y Servicios Públicos de otrora para convertirla en una oficina sin elementos y menos todavía materia gris.
Según trascendió, “lo que queda claro es que el gobierno nacional no tiene en sus planes soltar un solo centavo para terminar la obra”
El resultado se nota en el estado de las calles de la ciudad, los suburbios, el parque natural y los caminos rurales. También en la suciedad y la falta de mantenimiento de los espacios verdes y obviamente en la falta de desarrollo integral de una administración que ni siquiera pudo sostener lo que heredó.
Balestrasse no mostró nada nuevo, ni como ex secretario del municipio y tampoco como concejal, pudiendo llevar propuestas claras y precisas a las comisiones respectivas; pero nuevamente desde la tribuna la emprende contra Pinedo, quien desde hace cuatro años viene presentando planos y proyectos que por lo menos sostienen un argumento válido.
Afirma el arquitecto de la gestión Meoni que “debe considerarse que el puente bajo nivel se encuentra emplazado en una arteria comercial, y la propuesta no debe presentar obstáculos físicos que impidan una continuidad espacial. Por lo tanto, deben evitar circulaciones en trinchera y crear espacios abiertos que permitan la continuidad espacial y visual entre un lado y el otro del bajo nivel”.
Afirma que, a pesar de estas advertencias, los funcionarios nunca dieron información completa sobre las falencias del proyecto anterior.
Oportunamente el profesional había sido crítico al proyecto paralizado al afirmar que “un claro ejemplo de la mala planificación es la construcción de un puente peatonal con un costo multimillonario (1.200 millones de pesos a valores actuales), sin acceso al andén central, lo que obligará a los pasajeros a seguir cruzando las vías a pie, como hace un siglo”.
En ediciones anteriores, SEMANARIO abordó con detalles el tratamiento del nuevo proyecto que tendría un costo aproximado al 50% del anterior.
Agustín Pinedo destaca que el proyecto de su secretaría en 2009 proponía “dos calzadas para la circulación vehicular de 6 metros de ancho cada una, un separador central con una pendiente máxima de 5,35 metros, dos veredas peatonales y dos bicisendas de 2 metros de ancho cada una que descienden 3,35 metros respecto del nivel del terreno natural y sobre estas dos bandejas para el tendido férreo y la circulación de trenes”.
También contaba con espacios laterales a cielo abierto con suave inclinación y áreas parquizadas, lo que permitiría potenciar el desarrollo comercial de la calle Rivadavia.
La conservación de la doble mano en Av. Rivadavia y un acceso directo desde barrio Belgrano, eliminaba el recorrido laberíntico propuesto hace cuatro años.
Para Pinedo la obra paralizada constituye una oportunidad que está ligada a esta propuesta de 2009 junto a la de Tomasino, que permitiría eliminar tres vías de maniobra y optimizar el diseño.
“La posibilidad de eliminar tres vías de la playa de maniobras y, obviamente, la de Fecovita, que es técnicamente viable, deberá transitar el recorrido administrativo para la aprobación por parte de ferrocarriles y, si eso ocurre, mejorará aún más el proyecto de 2009 que hiciera la Secretaría de Obras Públicas”, destacó Pinedo a SEMANARIO y por ese motivo adjuntó los planos actualizados del proyecto que cumplió más de 15 años, con la eliminación de tres vías de maniobra y las imágenes de las distintas propuestas “para que los juninenses y sobre todo, los vecinos de Villa Belgrano puedan bregar por un pronto reinicio de la obra”, indicó el ex funcionario.
Al mismo tiempo y en función de las críticas que recibió por parte del concejal Balestrasse, instó al Ejecutivo petrequista a que “asuma la responsabilidad técnica, legal y financiera de la obra, y presente un proyecto definitivo con documentación acorde a su magnitud. De lo contrario, el Estado nacional nunca dará curso a ninguna solicitud”, finalizó el arquitecto Pinedo.